En Mayo de 2011, un equipo de 6 profesionales australianos del espeleobuceo (exploración de cuevas submarinas), liderado por National Geographic y la Fundación Waitt (Richard Harris), realizó una inmersión a la cueva más profunda de agua fría del mundo, aunque los submarinistas no han llegado hasta el final de la cueva. Ésta se encuentra en Nueva Zelanda, y se cree que lleva a la fuente del río Pearse (ver mapa).
En el siguiente vídeo podréis ver unas magníficas imágenes de espeleobuceo, el deporte extremo más peligroso, y es que a parte del riesgo que tiene bucear en una cueva submarina, las condiciones son realmente duras, apenas hay luz, y el agua está extremadamente fría. Los submarinistas tienen que ir adaptándose físicamente tanto para entrar como para salir de la cueva. Como ya decíamos antes, el equipo no consiguió llegar hasta el final, aunque tienen previsto volver a explorar la cueva en el 2012.
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